Un exconvicto que tenía nueve meses de haber dejado el penal de San Miguel, en donde pasó cuatro años acusado de un homicidio en la junta auxiliar de San Aparicio, fue asesinado de un disparo durante una riña registrada la madrugada de ayer dentro del centro nocturno “La Casita”, ubicado en la colonia Universidades.
Ayer minutos después de las cuatro de la madrugada, se reportó a los números de emergencia una pelea campal dentro del establecimiento ubicado sobre la Avenida Las Torres y calle Universidad Autónoma de Yucatán, por lo que se requería del apoyo policíaco y de paramédicos.
Al llegar el auxilio, los protagonistas de la pelea ya se habían dado a la fuga, y solamente estaba tendido en el piso, el cuerpo sin vida de un hombre de unos 24 años de edad, quien en ese momento estaba en calidad de desconocido, aunque más tarde llegaron sus familiares, quienes lo identificaron con el nombre de Eduardo N, vecino de San Aparicio.
Al sitio también llegaron peritos y agentes estatales de investigación de la Fiscalía General del Estado, quienes tras realizar algunas entrevistas, lograron saber que el bar funcionaba fuera de los horarios permitidos, pues fue a las cuatro de la madrugada cuando se registró la riña entre Eduardo y dos sujetos más, sin que se sepan las causas del enfrentamiento; uno de ellos sacó una pistola y asestó un solo disparo en el costado izquierdo al hoy finado.
Antes de que llegaran los elementos policiacos, los agresores se dieron a la fuga sin que alguien lo pudiera evitar. Sin embargo, fueron aportadas las características de los homicidas y se espera que más adelante se dé con el paradero del asesino.
El establecimiento nocturno fue cerrado y quedó con los sellos de clausura por parte de la Fiscalía General del Estado en lo que continúan las indagatorias de rigor, bajo la carpeta de investigación número 13672/2018/Zona Centro.
ERA CONVICTO POR HOMICIDIO
De acuerdo a fuentes extraoficiales, se sabe que Eduardo N, a la edad de 20 años, es decir, en el año 2014, fue detenido por la Policía Municipal el 10 de marzo de ese mismo año, tras ser acusado del asesinato de un hombre que fue apuñalado durante una riña en la esquina de la calle Yucatán y la Privada Santa Rosa en San Aparicio. Casualmente, el nombre de la primera calle tiene similitud con el nombre de una de las avenidas donde está el bar “La Casita”.
Eduardo N., pasó poco más de tres años internado en el Cereso de San Miguel, sin embargo, por alguna razón, logró obtener su libertad en diciembre de 2017. Para la mala fortuna del hombre, nueve meses después, perdió la vida tras ser asesinado.