El cadáver hallado al fondo de un pozo de San Antonio Mihuacán, Coronango, sí pertenece a un varón que se encontraba desaparecido desde el pasado 17 de febrero. Pese al estado de descomposición con el que fue localizado el cuerpo, vecinos de la zona tuvieron la oportunidad de identificar al hombre, por medio de la ropa con la que fue visto por última vez.
Se trata de Francisco Javier N., de 19 años de edad, quien llevaba una semana desaparecido, incluso por esta situación, en su momento, las autoridades de la Fiscalía General del Estado, dieron inicio a la carpeta de investigación número 559/2019 de la región de Cholula.
No obstante, de manera oficial, el cadáver permanece en calidad de desconocido hasta que se corrobore su identidad, a través de diversos estudios de genética. Al momento se desconoce la causa de muerte del joven.
Es de recordar que fue la mañana del domingo pasado, cuando vecinos de la avenida Allende, detectaron un olor fétido que provenía de un pozo que se localiza en el mismo lugar. Por lo anterior, dieron aviso al presidente auxiliar, quien, de forma simultánea, pidió ayuda al 911.
Policías municipales y agentes ministeriales se apersonaron en el sitio, donde confirmaron que, a 25 metros de profundidad de dicho pozo, había un cuerpo humano, de tal manera que solicitaron la intervención de los rescatistas de Protección Civil Municipal de Puebla, quienes, mediante un sistema de cuerdas, descendieron para extraer el cadáver.
Desde se instante, se presumió que la víctima era una persona que se encontraba desparecida, sin embargo, en las últimas horas, vecinos que pudieron ver el cuerpo, confirmaron que se trataba del joven hasta hace unos días, no localizado.
Por su parte, la Fiscalía de Puebla ya investiga este hecho para determinar si el joven pereció por accidente o si se trató de un crimen.