Una caja de madera con bolsas negras en su interior y de la cual escurría un líquido de color rojo que parecía sangre fue colocada debajo de un altar ubicado en plena vía pública en el municipio de San Simón Yehualtepec. El hecho alertó a los pobladores, que dieron aviso a la policía, pero a la llegada de las autoridades inexplicablemente la caja había desaparecido. En el sitio fueron hallados dos supuestos narcomensajes.
Fueron agentes federales quienes tomaron conocimiento de los hechos y embalaron los supuestos mensajes de advertencia, presuntamente dirigidos a integrantes de la delincuencia organizada.
Al cierre de la edición ninguna autoridad confirmó los hechos; sin embargo, fuentes extraoficiales compartieron a este medio un par de fotografías que tomaron de la caja antes de que sujetos desconocidos se la llevaran.