La sexagenaria que falleció por un posible infarto tras el asalto a la Ruta 61-A el pasado viernes a la altura del mercado Morelos, se dirigía a una reunión de la congregación religiosa a la que pertenecía; desafortunadamente, la crisis nerviosa que sufrió derivó en su muerte, dieron a conocer sus familiares.
Los mismos aseguraron que después de velarla y enterrarla, buscarán legalmente una indemnización por parte del transporte público, pues dicen, debe contar con el seguro de pasajeros.
En entrevista con EL SOL DE PUEBLA, la hermana de Aidé, de 60 años de edad, aseguró que lo más importante para ella era continuar con el protocolo para identificar y reclamar de manera oficial el cuerpo de su consanguínea, para luego velarla y darle sepultura.
“Después de esto, quizás ya tendremos cabeza para buscar la forma legal de que el concesionario responda con el seguro con el que debe contar la unidad colectiva, además de saber qué pasó con el botón de pánico que debió haberse activado para que la policía actuara de manera inmediata y hubiera evitado el asalto…”, detalló.
Agregó que el personal de la Fiscalía General del Estado le estaba brindando la asesoría y apoyo correspondiente para agilizar la entrega del cuerpo, aunque si debían esperar el tiempo necesario.
Reveló que su hermana Aidé pertenecía a una congregación religiosa, por lo que la mañana del viernes viajaba en la unidad de la Ruta 61-A para acudir a su “cátedra”, desafortunadamente le tocó ser una de las víctimas del atraco a la mencionada ruta; al igual que otros pasajeros, a ella también le robaron sus pertenencias, entre ellas su celular.
Una vez que los delincuentes escaparon, la sexagenaria comenzó a sufrir una crisis nerviosa y alguien llamó una ambulancia, pero al llegar los paramédicos del Sistema de Urgencias Médicas Avanzadas (SUMA), ya la encontraron sin signos vitales.
Un testigo reveló a los familiares que antes de que llegaran los paramédicos, alcanzó a decir el nombre de su hermana. Las autoridades lograron saber su domicilio por los documentos que llevaba.
Cuando llegaron policías municipales ya no fue posible ubicar y detener a los asaltantes, pero la Secretaría de Movilidad y Transporte (SMT) informó más tarde que cuenta con los videos de la cámara al interior de la van que captaron el momento del asalto y serán entregados a las autoridades ministeriales para coadyuvar en las investigaciones correspondientes.
La hermana de Aidé confesó que hace unos dos años, ya habían sufrido otro asalto en transporte público por la zona del municipio de Amozoc de Mota, pero en esa ocasión ella la acompañaba y enfrentó a los delincuentes diciéndoles que ella se encontraba mal del corazón y que se llevarán sus pertenencias, pero no le apuntaran con sus armas ni le hicieran daño.