A un año el doble feminicidio de una madre y su hija de solo 10 años, ocurrido en la comunidad de Escape de Lagunillas, perteneciente al municipio de Chietla, no hay personas detenidas y el caso sigue impune. Asimismo, dos personas ligadas el doble homicidio siguen prófugas.
Los hechos se registraron el 27 de enero de 2020, cuando autoridades ejidales de la comunidad dieron aviso a elementos de Seguridad Pública Municipal de Chietla sobre el hallazgo del cuerpo sin vida de una menor identificada como Mayra N, en un canal de riego en el paraje conocido como “Las Tazas”.
Horas después y a un kilómetro de distancia, fue hallado el cadáver de su madre, identificada como Isabel N.
De acuerdo con la información dada a conocer en su momento, la menor se encontraba semidesnuda, atada de manos, con huellas de agresión sexual, golpes en la mayor parte del cuerpo y presentaba al menos 13 lesiones provocadas por arma de fuego; la madre presentaba un tiro a la altura de la cabeza, golpes en el cuerpo y estaba semidesnuda.
Fuentes extraoficiales informaron que el doble crimen habría ocurrido entre la noche del domingo 26 y la madrugada del lunes 27 de enero. La fuente agregó que, al parecer, los responsables sometieron a la madre para que fuera testigo de cómo torturaban a la menor; posteriormente, ambas fueron asesinadas.
Una de las líneas de investigación apuntó a que al menos dos personas participaron en los hechos, entre ellos, un menor de 16 años, quienes hasta ahora se encuentran prófugos de la justicia; sin embargo, de acuerdo con gente del pueblo consultada por este medio, ambos se encontrarían aún en territorio mexicano y no como se especuló que habían salido del país.
Información recabada en la comunidad, refiere que los señalados como presuntos responsables son familiares de Isabel y Mayra. Además, sigue sin ser aclarado el móvil del doble asesinato, pue mientras una versión apunta a la disputa de un terreno de cultivo en la zona cañera, una más indica que se trató de un ajuste de cuentas por tema de secuestro.
Cabe mencionar que días después, en rueda de prensa, el gobernador del estado Miguel Barbosa Huerta declaró que ya habían sido identificados los responsables de este feminicidio, sin embargo, ha pasado un año y la Fiscalía General del Estado (FGE) no ha informado nada al respecto.
A principios de febrero de ese mismo año, elementos de Seguridad Pública Municipal, Estatal y Federal, en coordinación con la Agencia Estatal de Investigación, cateó uno de los domicilios de Escape de Lagunillas, donde se observó un sello improvisado con una hoja y cinta adhesiva, colocado en la puerta del inmueble con la siguiente leyenda escrita con lapicero: “CDI/16/2020/ATENCINGO, Y ACUMULADA”, además otra segunda carpeta “CDI/17/2020/ATENCINGO” con fecha “30/ENERO/2020” y el nombre de “SAMANTHA …”.
Tras los cateos, trascendió la presunta detención de una mujer, sin embargo, con el paso de las horas se confirmó que ésta únicamente fue trasladada a la ciudad de Puebla en calidad de presentada para rendir su declaración y posteriormente fue puesta en libertad.
HERMETISMO DE LA FISCALÍA
Este medio solicitó información a la Fiscalía General del Estado de Puebla para conocer los avances en el caso y el estatus de la investigación, sin embargo, al cierre de edición sólo se limitó a informar que sigue investigando.