Por primera vez en Puebla un dispositivo de vigilancia georeferencial le fue colocado a un sujeto procesado por el delito de violencia familiar y lesiones. Lo anterior atendiendo a las medidas cautelares dictadas y permitidas dentro del Código Nacional de Procedimientos Penales en asuntos de materia penal. Se trata de una acción conjunta por parte de la Fiscalía General del Estado y la Secretaría de Seguridad Pública del Estado.
De acuerdo con información oficial, el 26 de febrero de 2018 el ahora imputado, Mariano N., llegó a su domicilio en la Unidad Habitacional Villa Frontera, donde agredió físicamente a su esposa así como a su hijastro, un menor de edad que trató de defender a su progenitora. No obstante, también fue golpeado y herido por el hoy acusado.
Debido al riesgo que corren las víctimas se determinó por parte de la autoridad que se le colocara al presunto agresor un localizador consistente en una tobillera electrónica, la cual le permitirá tener movilidad en el perímetro marcado por el juez. En caso de acercarse a la zona de exclusión se emitirá una alerta. La dirección de Medidas Cautelares de la Secretaría de Seguridad Pública Estatal es la instancia que dará seguimiento al dispositivo para verificar el cumplimiento de la determinación.
Al sustentarse los delitos la Fiscalía General del Estado solicitó y obtuvo, además de la colocación del localizador, las siguientes medidas cautelares: no acercarse a la víctima, exhibir una garantía económica, recibir terapia psicológica y firma periódica ante el juez.
Cabe señalar que, de acuerdo con el Código Nacional de Procedimientos Penales, en sus artículos 153, 154 Fracción I, y 155, estipula que, a solicitud del Ministerio Público o de la víctima, el juez podrá imponer medidas cautelares en un asunto de materia penal, entre las cuales se encuentran considerados los localizadores electrónicos, que en Puebla se implementan a través de la dirección de Medidas Cautelares y Policía Procesal de la SSP.
El dispositivo es de uso discreto para evitar que llame la atención y que el imputado sea estigmatizado y/o discriminado. Asimismo, este mecanismo sirve para monitorear los movimientos que realiza la persona que está enfrentando el proceso penal mediante el Sistema de Posicionamiento Global (GPS) para evitar que transgreda el área donde existe la prohibición de acercarse a la víctima o a un perímetro determinado.
Estas acciones se enmarcan en el sistema de justicia penal acusatorio, siguiendo el imputado el proceso en libertad, pero garantizando la medida restrictiva en favor de la protección de la víctima. Por su parte, la FGE exhorta a víctimas de violencia familiar a que denuncien para que, con respeto a los derechos humanos y de acuerdo a cada caso, se realicen las investigaciones a las que haya lugar.