Además de sufrir la pérdida de su hija, presuntamente asesinada por su pareja sentimental, hoy sufre malos tratos por parte de funcionarios públicos que deberían estar de su lado en la búsqueda de justicia, aseveró Susana N, madre de la víctima.
Se trata de la fémina que llevaba el mismo nombre de su progenitora, Susana N, la mujer de 33 años, quien se desempeñaba como analista en la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) del Estado y quien este 20 de noviembre cumple dos años de haber sido sepultada, tras ser presuntamente asesinada por su pareja Efrén N, en su momento elemento de la Policía Estatal y actualmente preso desde hace cerca de un año, pero que aún no recibe sentencia.
Sufre cáncer e injusticias
La madre de Susana, además de sufrir la pérdida de su hija, actualmente tiene dificultades para poder sostener los gastos de su casa y las tres menores que dejo en la orfandad “Susi”, como le decía de cariño a su hija; por lo que tiene incluso que hacer trabajos de limpieza en casas ajenas, lavar y planchar, entre otras labores domésticas.
Lo anterior sumado a que debe llevar un tratamiento médico por padecer de cáncer de mama.
Pero si fuera poco, debe padecer injusticias y malos tratos de parte de los servidores públicos con los que debe tratar en la búsqueda de ayuda, tanto para el esclarecimiento del feminicidio de Susana, como para obtener el apoyo que le prometió el gobierno estatal y que a la fecha parece todo lo contrario, ya que le han negado becas para que las niñas sigan estudiando, una indemnización y la pensión que según iba a recibir, pues tanto la víctima como el supuesto victimario, eran empleados gubernamentales.
“Ya va a hacer un año y hasta ahorita no han hecho nada, todas las audiencias nos la han suspendido y alargando el proceso penal; él era policía estatal, entonces yo digo que qué clase de policías tenemos, creo que le están dando más prioridad al asesino que a la víctima y eso no se vale porque tienen que hacer justicia, yo tengo tres niñas y el gobernador prometió dar una pensión para ellas. Mi hija era el sostén de la casa, nos veía y hacía todo por nosotros y sus hijas”, explica entre lágrimas la declarante.
Lavando ropa ajena, barriendo y limpiando pisos es como actualmente la señora Susana se gana la vida. Con ello y el apoyo que pueden brindarle sus dos hijos, sobrinos y también un hermano que desafortunadamente falleció hace dos meses, es como ha logrado salir avante a esta situación.
Sin embargo, lo anterior no le es suficiente para solventar todos los gastos que se requieren y una de sus mayores preocupaciones es continuar sacando adelante a sus nietas de seis, diez y 12 años de edad, respectivamente.
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“Toda esta situación es muy triste, yo todavía no lo asimilo, porque para mí es una pérdida muy grande, se quedaron mis niñas huérfanas, no me gusta decirlo y me duele que digan, “las huérfanas”, eso es lo que más me duele en el alma, ahorita ya va a ser un año, y no ha pasado nada, no hay justicia. Me pongo a pensar en todas las mamás que están pasando por lo mismo y se tienen que quedar calladas, esto no se vale, no hay apoyo y va a llegar el momento en que mis hijos se cansen, ya que ellos también tienen su familia, y mi hermano que me daba dinero y me acompañaba a todas partes buscando justicia, murió apenas hace 2 meses”, confesó Susana.
La madre de la hoy occisa lo que pide es justicia, pues agrega que incluso las autoridades no lograron catear el domicilio del acusado ya que, en su momento, la madre de Enrique no les permitió el ingreso debido a que no contaban con una orden de arresto; después de esto, la madre del detenido optó por irse de su casa y así evitar a las autoridades, asegura la entrevistada.
“Que se haga justicia, que de verdad trabajen, yo no veo nada, cuando fue lo de mi hija no vi que la buscaran, decían que la buscaban, pero no es cierto; también fueron a la casa de Efrén y la señora no quiso dejarlos entrar, seguro algo tenían. No se ve nada claro, él fue el asesino y no entiendo por qué le dan tanta preferencia”, resalta la entrevistada, quien también solicita el apoyo de la sociedad con trabajo para ella.
Susana señala que esta semana acudió a las oficinas gubernamentales donde tenía que presentarse para ver si estaba anotada para recibir las becas escolares para sus 3 nietas, pero de manera grosera y déspota, un señor que la recibió le gritó que no estaban en la lista y que no iban a salir porque ellas están en una escuela de dinero, cuando, explica Susana, están en el Centro Escolar Gustavo Díaz Ordaz.
“Ahí me encontré a una persona que un familiar murió en un accidente automovilístico hace pocos meses y ya le dieron una beca estudiantil; a mí que me asesinaron una hija, trabajadora y un trabajador del Gobierno del Estado, no me pueden o no me quieren dar esas becas prometidas en público, no puedo entender por qué…”, cuestiona la señora Susana.
El feminicidio de Susana sigue impune
Aunque en una ocasión en la cocina de su casa Efrén empujó violentamente a Susana y otras veces la madre de ella le descubrió moretones en los brazos, jamás imaginó que el 7 de noviembre de 2020 discutirían tras regresar de una fiesta, afuera de la casa de Susana, afuera de la unidad habitacional Xilotzingo.
El ahora expolicía estatal le quitó su celular y a empujones la obligó a subir a su camioneta y así se la llevó por la fuerza y jamás la regresó, lo que generó una intensa campaña para su búsqueda.
Fue el 19 de noviembre de ese mismo año, minutos después de las seis de la tarde, que al servicio de emergencias 9-1-1 entró una llamada en la que se indicaba la localización del cadáver de una mujer semidesnuda, a un lado del Periférico Ecológico, entre el bulevar Forjadores y la calle Morelos, en el municipio de Cuautlancingo.
El cuerpo presentaba huellas de violencia, por lo que se establecieron los protocolos de feminicidio; un día después se confirmó que se trataba del cuerpo de Susana.
Por lo anterior, hoy sus familiares llevaron al panteón donde descansan sus restos, una cruz en conmemoración a su segundo aniversario luctuoso, en medio del dolor, porque a lo largo de estos dos años no hay justicia.
Se alarga el proceso penal
Pese a que el 18 de enero de 2021 se logró la detención de Efrén en el estado de Chiapas y fue traslado a Puebla bajo el delito de desaparición de persona y después se le fincaron cargos por feminicidio; a la fecha no cuenta con una sentencia condenatoria.
“Nos han venido suspendiendo las audiencias como ocurrió la ultima vez, el pasado 24 de octubre, sin argumento alguno, la misma Fiscalía General del Estado al exigirle que ponga de su parte, con malas caras nos dicen que no se puede hacer más; tuvimos que dejar al abogado de oficio porque nunca debatía y no movía nada del caso”, detalló Susana.
“Nosotros solo queremos pedirle al gobierno del estado que nos apoye con lo que nos prometió en una de sus ruedas de prensa matutinas, además de hacer justicia y castigar al responsable con el otorgamiento de becas escolares para mis tres pequeñas nietas, además de una indemnización y pensión; ya no queremos que nos sigan dando malos tratos los servidores públicos a los que tenemos que buscar para estos trámites, pues nos tratan como criminales cuando en realidad somos víctimas”, puntualizó Susana, de 66 años.