Más cien datos de pruebas son los que el día viernes se presentarán en la apertura de juicio oral dentro del proceso jurídico que se sigue en contra de los tres detenidos por el asesinato de tres estudiantes de medicina y un chofer de Uber, en el municipio de Huejotzingo, en febrero de 2020.
Después de varias horas de viaje, desde Colombia y Veracruz, este jueves, los padres de Ximena, de 25 años de edad; Antonio, de 22 y Francisco Javier, de 22, junto con sus asesor jurídico Ricardo Fuentes, ofrecieron una rueda de prensa a los medios de comunicación.
Además de recordar lo difícil que ha sido el proceso legal, el abogado de la familias de las víctimas adelantó que serán alrededor de cien pruebas documentales, testimoniales, entre otras, la que se presentarán el día 25 de febrero ante un Tribunal de Enjuiciamiento.
“Son más de cien medios probatorios, de los cuales, sin duda alguna, vamos a poder comprobar tanto la Fiscalía como el asesor jurídico, vamos a probar la responsabilidad y la participación de los acusados”, expresó el litigante.
Respecto a la línea de investigación en el caso, Ricardo Fuentes descartó por completo la hipótesis del robo de sombrero de Ximena, y comentó que además del robo del vehículo, existen otras cuestiones que se ventilarán en el juicio.
Sobre la declaración inicial del fiscal Gilberto Higuera Bernal, respecto a que la banda delictiva que cometió los hechos estaba conformada por diez personas, el litigante aclaró que no existen indicios o algo que indique que haya más participantes, pues los acusados declararon haber participado por cuenta propia.
En cuanto a Felipe N, alias “El Pirulí”, señaló que después de las indagatorias, no se encontró relación alguna con el multihomicidio.
Aunque en la audiencia de vinculación a proceso, el agente del Ministerio Público no pudo precisar la participación de cada uno de los implicados, a decir del abogado, ya se cuenta con la claridad de qué hizo cada uno de ellos por lo que indicó, no habrá duda de su sentencia.
En este sentido, nuevamente solicitó a las autoridades correspondientes, la pena máxima por los delitos de homicidio calificado y robo de vehículo, con lo cual podrían alcanzar una pena de hasta 75 años de prisión.
Los padres de los jóvenes asesinados también pidieron un castigo ejemplar para los implicados.
Las familias que hemos sido víctimas por el homicidio de nuestros hijos, pedimos al señor gobernador y al presidente del Tribunal Superior de Justicia, que se aplique con todo rigor y de manera estricta todo el peso de la ley sobre las persona que privaron de la vida a nuestros queridos hijos comentó Angélica Cerpa, madre de Antonio o Coty.
Mientras que el padre de Ximena pidió que la muerte de su hija y los demás jóvenes no sea en vano.
“Es un dolor grandísimo que estamos atravesando las cuatro familias, incluso la del conductor de Uber y lo que queremos es que ese sacrifico de nuestros hijos no quede en vano, esta es la oportunidad para que la sentencia que se les dé a estos canallas sea un ejemplo y escarmiento porque esto es un dolor horrible, inmensamente grande eran estudiantes de medicina que vinieron a salvar vidas a este hermoso país y desafortunadamente ya saben lo que ocurrió”, recordó el padre de Ximena.
A su vez, el padre de Javier pidió que el castigo que se le aplique a los culpables, sea para que ningún estudiante vuelva a ser tocado como lo hicieron con su hijo y el resto de las víctimas.
Bajo estas peticiones es que el día viernes, esperan que sin ningún tipo de contratiempo, se realice la apertura del juicio oral.
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