Un herrero de 33 años de edad fue asesinado a balazos, la madrugada de ayer en la colonia Tres Cruces, al suroriente de la ciudad. Los responsables dispararon de un vehículo en movimiento para luego huir de la zona, sin que al momento se conozca el móvil de los hechos.
Todo ocurrió sobre la calle Fray Juan de Grijalva, casi esquina con la avenida 3 de Mayo, tercera sección. Ahí, Mario de 33 años de edad, se encontraba ingiriendo bebidas embriagantes con un amigo, sin embargo, ambos fueron sorprendidos por sujetos empistolados, que, desde un vehículo en movimiento, dispararon en diversas ocasiones.
Mientras el amigo de Mario se tiró al suelo, logrando salvar su existencia, el hoy occiso corrió para tratar de huir de la agresión.
Al menos tres balas, alcanzaron a lesionar al herrero, quien pereció en el sitio, sobre la calle Fray Juan de Grijalva. Tras lograr su objetivo, los homicidas escaparon de la zona para así evitar ser capturados por las autoridades policiacas, quienes ante los hechos, fueron solicitados por vecinos que llamaron al 9-1-1.
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Tanto uniformados municipales como Técnicos en Urgencias Médicas, acudieron a la escena del crimen, donde hallaron tirado y herido al varón.
Luego de las revisiones de los paramédicos, estos confirmaron que la víctima carecía de signos vitales, por lo que agentes policiacos acordonaron el área hasta la llegada de los elementos de la Agencia Estatal de Investigación, quienes encabezaron las diligencias del levantamiento de cadáver, las cuales fueron anotadas en la carpeta de investigación 1478/2019 de la Zona Centro.
En tanto, en el lugar, se supo que Mario solía reunirse los fines de semana con sus amigos, con quienes ingería bebidas embriagantes, situación por la que incluso, ayer poco antes del crimen, la madre del hoy finado salió a recriminarle su actitud. Ante tal situación, el herrero le prometió a su madre que sería la última vez que tomaba, no obstante, minutos después fue ultimado de tres balazos en la espalda, quedando tirado a media calle.
Mientras algunos vecinos miraron con sorpresa lo ocurrido, los familiares de la víctima no daban crédito al hecho, clamando justicia.