El dueño de un grupo sonidero es la persona que el día 23 de diciembre del año pasado, los agentes de la Fiscalía Especializada en la Investigación de Delitos de Alta Incidencia (FEIDAI) buscaban en la colonia México 83 y que, por error, entraron a la casa de una joven que incluso denunció robo y diversos abusos cometidos por parte de los agentes investigadores.
Fuentes cercanas al caso dieron a conocer que se trata del dueño de un grupo sonidero reconocido en Puebla, que tan solo un día después de que se realizó el operativo de manera equivocada, se fue de la colonia.
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Incluso, el color de la fachada de la casa que habitaba el sospechoso fue pintada de otro color. De acuerdo con las fuentes consultadas, al hombre en diversas ocasiones se le vio reunirse con familiares de líderes comerciales, circunstancias que presumieron las fuentes, le daría protección al sujeto. Ahora no se sabe dónde se encontraría.
Por su parte, la joven que denunció los abusos de los que fue víctima por parte de los agentes investigadores, comentó que al momento no ha tenido ninguna resolución de su caso, pues además de que le solicitaron facturas y tickets de las pertenencias que le fueron robadas, le indicaron que será un juez de control quien determine el delito a perseguir, y por ahora no cuenta con una fecha para audiencia.
La joven resaltó que algunos de los objetos que le robaron fueron anillos, una esclava y aretes heredados por su familia, por lo que además del valor monetario, se trata de joyería con un importante valor sentimental.
En tanto, Aris sigue a la espera de que se le haga justicia y de que a los agentes involucrados en la intervención policial se les castigue bajo los cargos de robo, abuso de autoridad y allanamiento de morada.
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Fue el 18 de enero del presente año que Aris Arce, al no tener una respuesta de la Fiscalía de Puebla, decidió hacer público su caso.
A través de redes sociales, la joven exhibió imágenes y videos de cómo los elementos dejaron su casa, además de que relató que le robaron cremas, joyas y 50 mil pesos en efectivo que tenía de los cobros de eventos que previamente había realizado, ya que se dedica a la animación de eventos.
No obstante, también mencionó que los agentes ministeriales derrumbaron el zaguán de la casa donde rentaba, por lo que creyó que iban a matarla o a secuestrarla, pues ella, destacó, no debía nada.
Más tarde se supo que se habían equivocado de casa y aunque el caso ya es investigado debido a que la agraviada interpuso la denuncia correspondiente, hasta el momento no hay detenidos.
En el caso de las afectaciones a la vivienda, Aris comentó que la dueña vive en Estados Unidos y debido a esa circunstancia, no ha podido interponer la denuncia a la que haya lugar por los daños y el allanamiento de morada.
