Después de tres días de agonía, finalmente murió uno de los cinco ladrones de combustible (huachigaseros) que resultaron gravemente heridos por severas quemaduras tras una explosión cuando se encontraban en una bodega que ocultaba una toma clandestina en ductos de Pemex, la mañana del lunes pasado, atrás de la planta automotriz de Volkswagen en el municipio de Cuautlancingo.
El ahora occiso respondía en vida al nombre de Ángel, de 36 años de edad, quien sufrió quemaduras en el 70 por ciento de su cuerpo y estaba intubado, hospitalizado en Traumatología y Ortopedia del Sector Salud.
Aún se encuentran internados en el mismo nosocomio, otros cuatro heridos, uno de 18 años, quien tiene medio cuerpo quemado; otro de 23 años, con quemaduras del 30 por ciento de su superficie corporal; uno más de 27 años que tiene el 56 por ciento del cuerpo quemado; y finalmente uno de 23 años que tiene el 45 por ciento de superficie corporal quemada. Todos siguen bajo el diagnóstico de graves.
Aquí se adelantó que al parecer un corto circuito o una chispa en el sistema eléctrico de una bodega construida en la puerta 6 de la planta alemana armadora de vehículos, provocó una explosión que movilizó a personal de Protección Civil Municipal de Puebla, paramédicos del Sistema de Urgencias Médicas Avanzadas (SUMA), Bomberos del Estado y Policía Estatal, y posteriormente de Guardia Nacional y Seguridad Física de Pemex.
Todos ellos, tras una amplia búsqueda, ya que había hermetismo del lugar exacto, hasta que finalmente ubicaron que se trataba de una bodega de ladrillo y techo galvanizado localizada a unos metros del Periférico Ecológico y la calle Prolongación Morelos de San Lorenzo Almecatla junta auxiliar de Cuautlancingo.
Al arribo no encontraron ni humo ni llamas o fuego en la zona, pero si estaba un vehículo de lujo de la marca Cadillac, negro, con placas de Tlaxcala, estacionado afuera y aparentemente abandonado (por los huachigaseros), y junto a él de manera terrorífica había rastros de piel humana calcinada, restos de ropa quemada y hasta un dedo humano.
Al inspeccionar en el interior de la bodega, se encontraron una camioneta GMC con caja seca que ocultaba un tanque estacionario de 10 mil litros y por fuera tenía la razón social de una empresa harinera; la pipa se encontraba al 5% de capacidad. También había una segunda camioneta GMC de color blanco sin razón social y con placas del estado de Oaxaca en el cual estaban ocultos dos tanques estacionarios con capacidad de 5 mil litros.
Además se encontraron 5 llaves de paso conectadas a una toma clandestina que se descubrió tapada con una alfombra azul, las cuales estaban cerradas y sin fuga.
Según testigos, de manera anónima, revelaron que los huachigaseros heridos se fueron por sus medios (en un taxi), descubriéndose primero que llegaron al hospital Puebla, pero por su gravedad tuvieron que ser trasladados al de Traumatología y Ortopedia donde hoy por la mañana, uno de ellos ya dejó de existir.