Un menor de apenas cuatro años de edad, que se encontraba sóloen su vivienda, al asomarse por la zotehuela, cayó desde un tercerpiso y una altura de tres metros, causándose serias lesiones, ayerpor la tarde en un edificio de la unidad habitacional de SanJorge.
Los hechos se registraron al filo de las 14 horas y aunque losvecinos corrieron a auxiliar al menor y minutos después llegaronparamédicos para brindarle los primeros auxilios, la ambulanciatuvo que esperar una hora para hacer el trasladado del niño a uncentro médico, hasta que llegó la mamá que hasta entonces seenteró de lo que había ocurrido a su hijo.
De acuerdo con versiones de las personas que ayudaron al menor,se sabe que al estar haciendo sus actividades normales, de prontoescucharon un golpe en seco y en seguida los gritos de un niño,percatándose que se había caído de la parte trasera del edificio11119 sobre la 12 Sur, al respaldo del bachilleratoQuetzalcóatl.
Al ver que el menor trataba de levantarse, pero tambaleaba ypodía caerse de nuevo un metro más, corrieron a ayudarlo,tratando de no moverlo porque estaba sangrando de la cabeza ytenía otros golpes en brazo y pierna; por lo que esperaron losvecinos la llegada de los cuerpos de auxilio a los que ya habíantambién llamado.
El menor por su corta edad y además de que estaba asustado ylastimado, no pudo decir su nombre ni de su mamá, pero explicódesde dónde se cayó, desde la zotehuela trasera de sudepartamento en el tercer piso del citado edificio, cayendo sobreuna plancha de concreto del primer piso.
Al llegar paramédicos de SUMA en la ambulancia 095, procedierona brindarle los primeros auxilios al menor, pero como no habíaalgún familiar tuvieron que esperar una hora para podertrasladarlo a un hospital.
Finalmente minutos después de las 15 horas, llegótranquilamente la mamá del menor, quien, aunque mencionó quehabía salido de compras, no traía ningún producto. Fue entoncesque le dieron la noticia de que su hijo había caído alvacío.
El menor fue identificado como Kevin Jair Rosas Nolasco; fuefinalmente trasladado –acompañado por su madre- al Hospital delNiño Poblano (HNP), donde quedó en manos de los pediatras para laatención y estudios que requiera.