Un sujeto de nombre Cristóbal Hernández Reyes y/o Julio Cristóbal Hernández Huerta, alias “El Julio”, fue sentenciado a 24 años, 3 meses y 11 días de prisión por el delito de trata de personas en su modalidad de explotación sexual, lenocinio y corrupción de menores, ello tras obligar a madre e hija a prostituirse.
Todo inició debido a que víctima “tenía una deuda económica con Cristóbal, quien al percatarse que la mujer no contaba con dinero ni trabajo, la forzó a ejercer la prostitución en un bar del municipio de Atlixco. Después bajo amenaza de hacerle daño, la orilló a que se mudara a su domicilio con sus tres hijos, una mayor de edad y dos menores”.
“Meses después, Cristóbal también obligó a la hija de la afectada a prestar servicios sexuales en el mismo bar que su progenitora y bajo condiciones de explotación”, explica un comunicado de prensa de la Fiscalía de Puebla
El Ministerio Público documentó los ilícitos y solicitó la orden de aprehensión contra el probable responsable. Una vez que se dio cumplimiento al mandato de captura por parte de agentes de investigación, se realizó el traslado al Centro de Reinserción Social; en paralelo, se desarrolló un operativo para rescatar a las víctimas.
Al darle seguimiento al proceso penal, la Fiscalía General presentó las últimas pruebas a la autoridad judicial que determinó en contra del responsable, prisión de 24 años, 3 meses y 11 días, además de una multa equivalente a 4 mil 732 días de salario mínimo, así como una cantidad económica por concepto de reparación de daño moral y reparación del daño material.