Colonias ubicadas a escasos cinco minutos del Centro Histórico sufren el embate de una banda delincuencial todavía no identificada pero que gusta de irrumpir en los negocios durante la madrugada, mantiene azorados a los dueños y trabajadores de establecimientos comerciales del barrio de Santiago, Santa Cruz Los Ángeles, Benito Juárez y demás aledañas, donde a decir de los afectados, la poca iluminación y mínima presencia policial, son elementos aprovechados por los delincuentes.
“Vienen, levantan la cortina metálica, no sabemos si con un gato o alguna especie de palanca pero la dejan media abierta, después regresan y es como la pueden abrir completamente para entrar a robar”, así es como según los entrevistados, operan los amantes de lo ajeno, quienes ante el caso omiso de las autoridades para atender la denuncias por estos hechos, roban las veces que quieren.
Tan solo para los negocios que se encuentran sobre la avenida 25 Poniente y hasta la 31, es el pan nuestro de cada día.
“Jamás proceden las denuncias que se han interpuesto, las autoridades no se ha acercado con nosotros, los robos son del diario en la 25, la 31 y Circuito Juan Pablo II. Hay locales que en una misma semana han sido abiertos dos veces”, contó la dueña de un local de venta de lámparas, que por seguridad pidió que su identidad quedara en el anonimato.
Los esfuerzos por instalar cámaras de vigilancia en algunos negocios, no han servido de mucho pues los ladrones se las ingenian para cortar los circuitos de grabación y así evitar que sus rostros sean captados.
Algunos más han recurrido a la colocación de alarmas, incluso en reforzar la seguridad de los candados de las cortinas metálicas pero estas medidas preventivas tampoco ha logrado ahuyentar a los hampones, de los cuales ni siquiera hay pistas.
“Lo que hacemos es resguardar nuestras puertas, si antes teníamos dos candados, ahora son cuatro, hemos duplicado las cerraduras de nuestras puertas y hemos colocados alarmas pero de nada sirve porque cuando tú llegas ya todo está fracturado”, denunció una comerciante.
Los afectados consideraron que todo esto se debe a la falta de vigilancia y la poca iluminación que existe en dichas colonias, donde no solo hay asaltos a comercios sino que también a transeúntes.
“Son muy frecuentes los robos, tanto a transeúntes como a comercios. Esto se debe a la falta de seguridad, se dan en la madrugada, han dado cortinazos. Queremos mayor vigilancia e iluminación porque a eso de las 8 de la noche que se cierran los locales ya todo está obscuro”, acusó una de las entrevistadas.
Más iluminación, patrullamiento e interés en la problemática por parte de las autoridades, es lo que piden los dueños de los negocios establecidos en las referidas zonas.