Un pseudocirujano que empleaba cédulas de otros médicos, fue denunciado penalmente por los familiares de una mujer de la tercera edad, a quien por "practicidad" le amputó los cinco dedos de su pie izquierdo, cuando en realidad la paciente tenía, aparentemente, dos dedos gangrenados. El supuesto médico además puso al borde de la muerte a la septuagenaria al provocarle una fuerte infección y otras complicaciones.
Los gastos que los agraviados invirtieron para la operación que realizó el presunto usurpador de funciones y los que llevan hasta el momento para que en un hospital privado esté siendo atendida de diversos malestares la víctima de 75 años de edad, casi llegan a medio millón de pesos, pero todavía calculan invertir al menos otra cantidad similar, señalaron en entrevista con El Sol de Puebla los familiares de la septuagenaria.
Por lo anterior, interpusieron la denuncia correspondiente por los delitos de Responsabilidad Médica, Usurpación de Funciones y los que resulten en contra de Joaquín N, quien ocupaba dos clínicas para atender a sus pacientes, una ubicada en el barrio de Santiago y otra en la colonia La Paz, de esta ciudad, cuyos responsables han dicho a los afectados que solamente el sujeto les rentaba, pero que no había más relación con el seudomédico, además de que presuntamente ya falleció, aunque, aseguran las víctimas, no existe registro de su deceso.
Cortó el quinto dedo porque ya no tenía caso dejarlo, dijo
Julio César, hijo de la agraviada de nombre Magdalena, relató que su mamá al ser diabética e hipertensa, dos de sus dedos del pie izquierdo comenzaron a ponérsele amoratados y aunque se encuentra asegurada por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), optaron por buscar un médico particular para que la atendiera por dicha situación.
Fue que así que conocieron a Joaquín N, quien se comprometió a realizarle la amputación de los 2 dedos debido a que según el “galeno”, ya se habían gangrenado y efectivamente debían ser amputados; esto sin ningún estudio que lo confirmara.
El día 9 de febrero del presente año fue sometida Magdalena a una cirugía en la clínica médica ubicada en la 13 Poniente y 13 Sur; al concluir vieron que el “médico” en lugar de cortarle los dos dedos indicados, también le amputó los otros tres. El argumento del seudocirujano fue que uno más se había contaminado también, además de aceptar que el cuarto dedo lo cortó por error, por lo que decidió que no tenía caso dejarle el quinto dedo, y terminó por dejar sin dedos a la víctima. Además en lugar de deshacerse de las partes del cuerpo, se las entregó a los familiares para que ellos mismos se encargaran de los conducente.
- Seguir leyendo: Cámara capta momento en que unidad de la ruta 68 atropella a menor en Xonacatepec [Video]
Otro de los aspectos que denuncian los agraviados, es que una asistente del “equipo de trabajo” del supuesto cirujano, al terminar la operación, según narró la propia paciente más tarde a sus familiares, le “picó” severamente en la espalda con una jeringa que contenía un líquido desconocido y a pesar de haberle reclamado, le indicaron a la septuagenaria que se dejara y no dijera nada.
Por dicha inyección, más adelante, le trajo consecuencias, pues Magdalena empezó a sentirse mal, por lo que fue llevada con otro especialista que con base a varios estudios, detectó que se trataba de un absceso que contenía sangre y que afortunadamente en otra operación pudo ser retirado y curado, pero el médico les advirtió que de haberse “reventado” con algún golpe, la sangre podría haber llegado hasta el cerebro y le hubiera costado la vida al instante a la fémina.
Usurpó datos de otro médico y ante reclamos se hace pasar por muerto
Después de que buscaron a Joaquín para reclamarle la aparente negligencia médica en la que incurrió, dejaron de saber de él; incluso, dijeron los afectados, en la clínica de la 13 Poniente y 13 Sur, les aseguraron que ya se había muerto el acusado, pero al darse a la tarea de investigar por su cuenta, no encontraron datos de su deceso en el Registro Civil, pero eso sí, al verificar sus cédulas profesionales, se dieron cuenta que en realidad pertenecen a otros médicos con nombres distintos a los de él; es decir, estaría usurpando funciones o robando identidades de profesionales de la salud.
La mañana de ayer, una persona cercana a la familia, asegura que vio al supuesto galeno en calles de la colonia El Porvenir, lo cual confirmaría que el sujeto se está escondiendo; además de que lo está ayudando un hermano que es agente ministerial, dijeron los afectados.
Por lo anterior, los familiares de la septuagenaria acudieron a la Fiscalía General del Estado para denunciar al seudocirujano, por lo que ya es buscado por las autoridades bajo la carpeta de investigación número FIM/FIM-1/007637/2022.
Los agraviados piden que caiga todo el peso contra el acusado y su equipo de trabajo que pudo haber provocado la muerte de la mujer de la tercera edad.
A decir de los quejosos, Joaquín N cuenta con antecedentes penales por una denuncia interpuesta en 1994, sin que conozcan a detalle sobre que versa ese caso y pidieron a las autoridades de la Fiscalía de Puebla investiguen y den con el paradero del sujeto, pues podría seguir laborando y poniendo en riesgo a más personas.
Las clínicas estarían bajo la lupa
En lo que se refiere a las clínicas donde laboraba Joaquín, al negar incluso información a las autoridades ministeriales sobre el paradero o ubicación del seudomédico, los denunciantes adelantaron que inicialmente la Fiscalía General del Estado se enfocará a indagar la situación profesional del acusado para determinar si efectivamente usurpó funciones y en caso de resultar así, enviarán los oficios correspondientes a los propietarios de los establecimientos médicos para determinar también su relación con el “cirujano”.