Las cámaras de fotomulta que desde hace dos meses habían sido desvalijadas sobre Periférico Ecológico, ya fueron restauradas y protegidas con alambre-cuchilla a fin de evitar que delincuentes nuevamente hagan de las suyas y hurten baterías o cinanómetros con los cuales funcionan.
Desde la mañana del domingo, un grupo de trabajadores fue visto colocando de nueva cuenta baterías y demás artículos que fueron robados por sujetos desconocidos a lo largo del Periférico Ecológico, desde el fraccionamiento Haras del Bosque hasta la unidad habitacional La Guadalupana.
Además de colocar candados en las cajas metálicas donde va el cinemómetro para medir la velocidad a la que circulan los automovilistas.
En la parte intermedia entre la cámara y el cinemómetro fueron colocados rollos de alambre-cuchilla para protegerlos.
El pasado 8 de junio, tras un recorrido por la citada vialidad, El Sol de Puebla evidenció que seis de las ocho cámaras de fotomulta colocadas en esa área fueron blanco de la delincuencia. Este medio documentó que a cinco les robaron la batería y a una más, el cinemómetro, dispositivo diseñado para medir en tiempo real la velocidad de un automóvil.
Solo dos, en dicha zona, se salvaron de ser desvalijadas. Aunque el tramo corresponde exactamente al mismo en el que, desde hace al menos dos años, se han presentado el robo de baterías a las lámparas solares, solo las cámaras para multar a los automovilistas fueron restauradas, mientras que el alumbrado público sigue igual en ese tramo del Periférico Ecológico, el cual se encuentra en penumbra, convirtiéndose incluso en un punto peligroso en el que automovilistas, motociclistas o quien circule por ahí, se encuentran a merced de la delincuencia.