El hombre que ayer fue hallado sin vida y debajo de un automóvil abandonado en calles de la colonia Tepeyac, murió de causas naturales. Se pensó que había sido golpeado pero fue debido a que la fauna silvestre ya le había devorado la cabeza.

Así lo revelaron fuentes ministeriales después de que peritos y agentes de la Fiscalía General del Estado se encargaron de las diligencias del levantamiento de cadáver de quien hasta el momento continúa en calidad de desconocido, con apariencia de indigente.

Aquí se adelantó que ayer al filo del mediodía una persona que pasó a un lado de las vías del tren (Avenida del Ferrocarril) a la altura de la calle San Pedro se percató que había sangre junto a un automóvil Volkswagen tipo Sedán, mejor conocido a como “Vochos”, gris descolorido y en abandono.

Al asomarse vio que debajo estaba un hombre ensangrentado e inerte.

Por ello llamó de inmediato al número de emergencias 9-1-1 y al llegar poco después policías municipales y paramédicos de Protección Civil Municipal, confirmaron que la persona estaba sin vida y presentaba aparente hundimiento de cráneo y destrozo del rostro.

Al suponer que se trató de un asesinato, los municipales resguardaron la zona y más tarde se presentaron peritos y agentes ministeriales de la Fiscalía General del Estado de la Unidad Especializada en la Investigación de Homicidios, quienes se encargaron de las diligencias del levantamiento de cadáver.

Ya con los primeros estudios forenses se precisó que en realidad la persona falleció por un mal hepático, es decir de causas naturales.

Además de descartar la muerte violenta, deduciendo que tenia así el rostro y cráneo, debido a que ya estaba siendo carcomido por las ratas.

También se indicó que vivía en situación de calle y padecía alcoholismo, lo que lo llevó a la muerte.