Arbitrariedades por parte del juez octavo de lo penal, es lo que acusan los padres de un joven de 27 años de edad, sentenciado recientemente a 17 años de prisión por los delitos de violación y violación equiparada. Hoy piden a las autoridades federales que el caso sea revisado a profundidad y se resuelva conforme a derecho ya que, aseguran, existen pruebas de que el joven no cometió tales ilícitos.
Gabriel Hernández Campo, defensor legal del acusado de nombre Hugo N., aseguró que en la declaración de la supuesta víctima, hay varias contradicciones pero no solo eso, sino que también, los exámenes legistas y sicológicos concluyeron que no hubo ningún tipo de agresión sexual contra la denunciante.
“No hay ninguna prueba que acredite que la víctima fue agredida sexualmente. El dictamen de sicología por parte de la Fiscalía, determinó que no presentaba ninguna característica de una persona que fue agredida sexualmente, incluso arrojó que la menor era manipuladora”, explicó el abogado.
Aunque dichas pruebas fueron presentadas a favor del imputado, a decir del defensor legal, el juez octavo de lo penal, Enrique López Criollo, simplemente decidió no tomarlas en cuenta y resolver con una sentencia condenatoria.
En este sentido, el litigante consideró que la decisión del juez se debió únicamente a la presión social y mediática, más no, a un trabajo de análisis objetivo.
Asimismo, el abogado de Hugo N., destacó que el otro joven que en 2014 fue detenido junto con su cliente, incluso obtuvo su libertad a los pocos días de su arresto.
Aunque ya existe una sentencia, el abogado del acusado promovió un amparo para tratar de echar atrás la decisión del juez. La familia del joven incluso tiene la esperanza de que Hugo consiga su libertad.
“A mi hijo le están truncando la vida, que vean el expediente, que no les de miedo dar una sentencia absolutoria, mi hijo no hizo nada”, comentó Sara N., madre del acusado.
Es de recordar que el presunto caso de violación, sucedió el 15 de septiembre de 2013. De acuerdo con la información que en su momento dio a conocer la entonces Procuraduría General del Estado, hoy Fiscalía, el día en mención, la agraviada de 17 años de edad, se encontraba con Hugo en un bar de la Avenida Juárez, donde ingirieron bebidas alcohólicas; más tarde, al sitio llegó otro joven ahora ya exonerado.
La menor al quedar inconsciente, según las investigaciones ministeriales, fue llevada a un hotel donde habría sido violada.
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