En medio de inconsistencias, amenazas y contradicciones, a unaño de los hechos, el caso de la joven Paulina Camargo Limónsigue sin resolverse, sin un cadáver ni pruebas contundentes queconfirmen la culpabilidad de José María Sosa Álvarez, acusado dehomicidio y aborto, delitos por los que sigue preso en el penal deSan Miguel.
Lo anterior, a pesar de que la defensa legal del jovenveracruzano ha ganado cuatro amparos, de los cuales sólo uno fuesometido a revisión ante el Segundo Tribunal Colegiado, y cuyaresolución continúa pendiente para así por fin, saber si “Chema” conseguirá su libertad o se le dictará una sentenciacondenatoria.
El viacrucis para las dos familias involucradas inició el 25 deagosto de 2015, cuando Paulina- con 19 años de edad y cuatrosemanas de embarazo-, no llegó a su casa luego de quesupuestamente acudiera a una cita en Plaza del Sol con su ex novioJosé María, quien estudiaba Ingeniería en Mecatrónica en laUniversidad del Valle de México campus Puebla.
De forma casi inmediata, los padres de la joven acudieron a laProcuraduría General de Justicia del Estado (PGJ), ahoraFiscalía, para interponer una denuncia por desaparición depersona. El ex novio de Paulina y principal sospechoso para lasautoridades, horas después fue llamado a declarar ante elMinisterio Público, únicamente en calidad de presentado.
Mientras el joven rendía su declaración, familiares y amigosde la joven desaparecida iniciaron una campaña de búsqueda através de las redes sociales, que provocó gran impacto y ganómuchos simpatizantes con la causa. Por la presión ciudadanaejercida, el Ministerio Público decretó la detención de JoséMaría, pero sólo por falsedad de declaraciones, ya que habíacaído en diversas contradicciones.
A pesar de que el imputado fue arrestado inicialmente por undelito muy distinto al que se le acusaba, horas más tarde, laentonces abogada de la familia de Paulina, Marisol Montes Baro,aseguró que “Chema” era responsable de feminicidio. Los padresde Paulina, incluso sostuvieron que el acusado aceptó haberlallevado a su departamento en la unidad habitacional La Margarita,donde la habría estrangulado para luego meterla en bolsas deplástico y depositar su cadáver en un contenedor de basura de lazona.
José María fue llevado al Cereso de San Miguel y con loanterior, se abrió una nueva línea de investigación, en la cualse involucró a un amigo de Paulina, ya que las autoridades creíanque éste había colaborado en el homicidio. Además, tras lahipótesis de que el cadáver de la joven fue tirado en la basura,se ordenó la búsqueda en el relleno sanitario de Chiltepeque.
Ahí, elementos del grupo canófilo “K-Zar de la Cruz Rojadelegación Puebla, así como bomberos, buscaron por varias semanassin encontrar rastro alguno de la joven, por lo que la pesquisa fuesuspendida y ampliada a otras zonas como Valsequillo y terrenosaledaños a La Margarita.
Después de que se determinara que el amigo de la joven noestaba involucrado en los hechos, la Fiscalía solicitó y obtuvola orden de aprehensión en contra de José María por los delitosde homicidio y aborto, a los cuales se sumó la acusación defalsedad de declaraciones. Casi un mes después de la desapariciónde “Pau”, el Juez Tercero de lo Penal dictó auto de formalprisión al indiciado por la probable comisión del homicidio deCamargo Limón y el aborto del bebé que esperaba.
Sin embargo, ante las diversas violatorias ocurridas en ladetención del sospechoso y en la obtención de las pruebas en sucontra, la defensa legal de “Chema”, interpuso cuatro amparosque fueron ganados; entre ellos y el más importante, está elotorgado el 4 de mayo de 2016 en contra del auto de formal prisiónpor las acusaciones de homicidio y aborto.
Tras este aparente avance a favor de José María, el MinisterioPúblico interpuso un recurso de revisión para que se estudiara elamparo y se ratificara o anulara la determinación del JuezAuxiliar de lo Tercero de lo Penal con residencia en Acapulco.
A pesar de la recusación tramitada por el abogado de“Chema” en contra de la admisión del recurso de revisión delamparo por homicidio y aborto, el Segundo Tribunal Colegiadorechazó el recurso y admitió que el caso se revisara a fondo, porlo que ahora es lo único que queda por esperar para conocer cuálserá el destino del supuesto responsable de la desaparición omuerte de Paulina Camargo.
En tanto, el caso ha transcurrido entre supuestas violaciones alos derechos de José María, irregularidades por parte de laFiscalía General del Estado al perseguir un delito que hasta ahorano ha podido comprobar, y los interminables llamados o exigenciasde justicia por parte de la familia de Paulina Camargo Limón.
Y es que por una parte, a la FGE se le “cayeron” lasprincipales pruebas que tenía para sustentar la acusación encontra de José María Sosa Álvarez, como la declaración deljoven, la supuesta gota de sangre hallada en su departamento, losvideos en los que presuntamente se ve a Paulina y a Sosa Álvarez,abordar un taxi, entre otras.
Todas estas supuestas pruebas fueron consideradas por laautoridad federal como ilegales, ya que incluso, cuando el jovendeclaró, no contaba con la presencia de un abogado y habría sidosometido a tortura para que aceptara su responsabilidad.
Por otro lado, en distintas ruedas de prensa, la familia de“Chema” ha acusado un presunto amedrentamiento por parte dela Fiscalía General del Estado, pues tan sólo el lunes pasado,señaló que el abogado que lleva la defensa de Sosa Álvarez, enalguna ocasión fue advertido para que dejara el caso si no queríaque le “dieran un levantón”.
Luis Alberto Sosa, padre del acusado, ha dejado entrever que lospapás de Paulina se han beneficiado con el caso, pues desdeentonces, señaló: “han cambiado su estilo de vida y hastatienen guaruras”. También sumó el hecho de que familiares dela joven fungen como servidores públicos en la misma Fiscalía yotras dependencias. Pese a lo anterior, el padre y el abogado deJosé María coincidieron en que las dos familias en el casoúnicamente son víctimas de las autoridades poblanas.
Por su parte, la familia de Paulina, a pesar de diferir entreque si ésta fue asesinada o sigue desaparecida y tienen laesperanza de que regrese a su lado, todo el tiempo ha sostenido que“Chema” es culpable de su homicidio.
Manifestaciones, misas, caminatas y rodadas se han realizado entorno a este caso para exigir que se detengan los asesinatos demujeres y que se haga justicia para la familia de CamargoLimón.
Mientras, el fiscal general del Estado, Víctor AntonioCarrancá Bourguet, ha reconocido la búsqueda del cuerpo dePaulina en distintos puntos de la república, como el Estado deMéxico y Veracruz, aunque de acuerdo con la informaciónproporcionada a este medio, uno de los cadáveres a los que se lesrealizó exámenes de ADN, y que fue considerado dentro delproceso, fue hallado meses antes de que desapareciera la joven de19 años de edad. En aquel momento, la familia de “Chema” dijotemer que la FGE sembrara un cuerpo para poder culparlo.
