Un infarto le arrancó la vida a un franelero de la Central deAbasto, minutos después de que llegó a laborar ayer pormadrugada.
El ahora occiso respondía en vida al nombre de Juan CarlosHernández, de 60 años de edad, quien era conocido como“Carlitos” y todos los días se colocaba en la lateral de laVía Corta a Santa Ana, a la altura de la avenida de “ElCanal”.
Según algunos comerciantes, todavía lo vieron con vida cuandollegó entre las 4 y 5 de la mañana, pero poco después notaronque donde estaba sentado no se movía. Sospechando lo peor,llamaron a los servicios de emergencia.
Al llegar los socorristas, confirmaron que ya no tenía signosvitales. Al sitio también se apersonaron policías municipales queacordonaron el lugar hasta la llegada del personal de la FiscalíaGeneral del Estado.
Más tarde, el personal ministerial, al encabezar lasdiligencias para el levantamiento de cadáver, fue abordado porfamiliares del finado, quienes demostraron que llevaba unexpediente de tratamiento médico. Al confirmar que se trató deuna muerte natural, se concedió a los deudos llevarse el cuerpopara darle debida sepultura.