Una mujer que se hizo cargo del entierro de su hermano, denunció ante este medio a un supuesto doctor que intentó obligarla a contratar un servicio funerario a cambio de poder liberar el acta de defunción.
La víctima, un hombre de 74 años de edad, murió el miércoles pasado, debido a un paro cardiorrespiratorio, lo que se conoce como “muerte natural”, en la soledad de su casa en la unidad habitacional Amalucan.
Aunque el septuagenario vivía solo, constantemente su hermana pasaba a visitarlo para saber cómo estaba y así lo hizo ese día por la mañana. Al llegar a la casa del varón, encontró a este con los ojos cerrados; al tocarlo, sintió que aún tenía algo de calor en su cuerpo, por lo que llamó al número de emergencia 9-1-1.
Poco después llegaron paramédicos de SUMA, quienes le indicaron que el masculino ya no tenía signos vitales, además de que no había huellas de violencia, por lo que se trataría de una muerte repentina propia de su edad.
Personal de la Fiscalía General del Estado también indicó que, como efectivamente se trataba de una muerte natural, no había delito que perseguir y entonces la familiar podía hacerse cargo del cuerpo; únicamente debería entregar el acta de defunción por parte del médico de cabecera del hombre.
Instantes después, llegó un hombre que se identificó como el “Doctor Jorge”, quien le dijo a la mujer que él le facilitaría el acta de defunción por un costo de mil 800 pesos; además de pagar esa cantidad, también le dijo que debía comprar un paquete funerario con él.
Entre los documentos que dejó el finado, su hermana encontró un paquete que previamente el hombre había pagado con Funerales Nava Amalucan, el cual cubría el costo total del servicio funerario.
Ante esto, únicamente necesitaba el acta de defunción, pero el “Doctor Jorge” no se la quería otorgar. La fémina llamó a la Fiscalía para saber qué podía hacer, por lo que le indicaron que como ya había dado el nombre de ese doctor, ellos ya lo tenían asentado así y no podían modificarlo porque le causaría problemas.
La mujer finalmente consiguió con un verdadero médico particular el acta de defunción y pidió a las autoridades de la Fiscalía que la aceptaran.
Fue hasta la medianoche del mismo día cuando por fin pudo obtener el documento. Acto seguido acudió a entregarlo a las oficinas ubicadas en la colonia La Popular.
Finalmente, con escasos vecinos y conocidos, su hermano pudo ser velado y sepultado.
La fémina hace público su caso para advertir a la ciudadanía que no se deje timar en casos como este, pues ella afortunadamente encontró el paquete funerario y logró conseguir el acta de defunción, de lo contrario se hubiera endeudado para poder pagarle a un timador, como calificó al llamado “Doctor Jorge”.