Un habitante de San Miguel Espejo se llevó el susto de su vida, al ver que unos perros devoraban un cuerpo humano abandonado en campos de cultivo de esta inspectoría ubicada en los límites de Puebla y Amozoc de Mota, ayer por la mañana.
Fuentes policíacas revelaron que un campesino pasó por la zona alrededor de las 04:30 horas y no había nada, sin embargo, cuando regresó de ver sus terrenos, alrededor de las 8 de la mañana, encontró a varios perros callejeros disputándose algo; al acercarse, descubrió que se trataba del cuerpo de un hombre.
Por lo anterior, las autoridades ministeriales deducen que la víctima habría sido asesinada en otro sitio y arrojada en el mencionado punto.
El lugar, a escasos 500 metros de la desviación de la carretera principal a San Miguel Espejo y muy cerca del panteón del lugar, fue acordonado por policías municipales de Puebla y Amozoc, además de elementos de la Guardia Nacional que también tuvieron conocimiento del reporte, para preservar posibles indicios.
Más tarde llegaron peritos y agentes ministeriales de la Fiscalía General del Estado, quienes se encargaron de realizar las diligencias del levantamiento de cadáver.
Durante los trabajos se anotó que la víctima, de entre 20 y 30 años de edad, aproximadamente, se encontraba semidevorada por la fauna silvestre, además tenía las manos atadas con un fleje de plástico negro en el que se apreciaba un tatuaje del que no se describió sus características.
También se descubrió que presentaba un disparo en la cabeza. Vestía pantalón negro y playera de manga larga en color amarillo. La ropa estaba llena de tierra; se presume que tras ser asesinado en otro sitio, lo arrastraron hasta el lugar del hallazgo.
Personal de la Unidad Especializada en la Investigación de Homicidios ordenó el traslado del cuerpo al anfiteatro para hacerle la autopsia de ley y esperar a que alguien se presente a identificar y reclamar a la víctima que quedó registrada como desconocida.