“No es justo que nos estén amenazando, la vida de mi papá no valía un servicio funerario y 637 pesos que la empresa de seguridad privada nos quiere dar”, consideró Liliana, hija de José Agustín N, de 61 años de edad, asesinado al intentar frustrar un asalto a tienda Oxxo en la colonia Lomas de Atoyac, el pasado miércoles.

Con la impotencia y el temor a sufrir algún tipo de represalia por parte de la empresa "Integrity Protection Services”, la familia de José Agustín contó que ellos trabajaban en las ferias, sin embargo, ante la contingencia sanitaria por Covid-19 y las restricciones que ello conlleva se quedaron sin trabajo; la desesperación de buscar el pan de cada día, llevó a Agustín a meterse de guardia de seguridad privada, luego de que un amigo lo recomendara.

Ahí sin mayor protocolo, ni capacitación, lo aceptaron e inmediatamente lo pusieron a trabajar, proporcionándole únicamente su uniforme, macana y botas.

“No le dieron ninguna capacitación, ni ningún tipo de protección como chaleco antibalas, el seguro social ya lo tenía pero no uno de vida, a pesar de que era un trabajo de alto riesgo”, comentaron en entrevista para El Sol de Puebla.

Los dolientes de igual manera indicaron que a pesar de que los representantes de la empresa se seguridad privada para la cual llevaba dos días trabajando José Agustín, externaron que se harían cargo de los gastos funerarios y les ofrecieron una indemnización de 637 pesos que no han aceptado ni se les ha entregado, ahora los amenazan por hacer público el caso, mostrar su inconformidad y exigir un pago por seguro de vida.

“No querían hacerlo, no sé si se vieron obligados, pero al final nos dijeron que iban a cubrir los gastos funerarios de mi esposo, nos dijeron que ellos no manejan seguro de vida, solo del IMSS y que como él solo había trabajado dos días, no se podía hacer otra indemnización o alguna otra ayuda. Ahorita ya le hablaron a mi hijo, le dijeron que no se vale que estemos actuando así que nos atengamos a las consecuencias, que todo se nos puede revertir que van a venir a la funeraria con su jurídico y que estemos también con nuestro abogado”, explicó la viuda del guardia de seguridad privada, la cual refirió que Agustín era el sustento del hogar y su compañero de vida por 32 años.

Tras los hechos, no saben qué harán para sostenerse, pues le toca pagar renta y tiene otra hija menor de edad, por ahora, solo queda el recuerdo de un buen padre, amoroso, bondadoso y siempre preocupado por su familia.

Hoy, de igual manera piden justicia, el máximo castigo para los dos detenidos y la pronta localización y detención de los dos sujetos que aún se encuentran prófugos de la justicia.